Acelgas. Como a otros vegetales de hoja verde (lechugas, canónigos, espinacas, cardos, berros, berza, borraja, etc.) se deben guardar en un recipiente cerrado en el refrigerador, con un poquito de humedad, que se consigue con una toallita o papel de cocina mojados o echando gotas de agua por todo el recipiente.
Índice
Cómo congelar acelgas
Déjalas sobre el papel mientras terminas de blanquear toda la cantidad de acelgas. Una vez que hayas terminado de hervir todas las acelgas, divídelas en porciones según las vayas a consumir y guárdalas en bolsitas para el congelador. Un consejo: no llenes las bolsas hasta el máximo, deja siempre algo de espacio.
¿Cuánto tiempo se puede freezar la acelga cocida?
Antes de introducirlas en el congelador, debemos poner la fecha en la que realizamos el envasado. Ya que hay que tener en cuenta que debemos consumirlas entre 8 y 12 meses después de la fecha de envasado.
¿Cuánto duran las acelgas en la nevera?
Para conservar acelgas frescas o hervidas en un corto plazo puedes mantenerlas en la nevera durante 3 días. También, puedes optar por congelarlas hasta por 12 meses.
¿Cómo se congela la espinaca cruda?
También puedes utilizar papel de cocina para secarlas. Paso: Enrolla las hojas de espinacas en forma de bolas para crear porciones óptimas. Mete las bolas en una bolsa de congelación Ultra-Zip® de Albal® y congélalas. ¡Listo!
¿Cómo congelar espinaca y acelga?
Cómo congelar espinacas o acelgas
- Lavamos las acelgas sin los tallos o las espinacas y las ponemos hacerlas al vapor una vez echas las retiramos.
- Las colamos y una vez fría empezamos agarrando porciones chicas y exprimimos para que salga toda el agua y formamos las bolitas.
¿Cuánto tiempo se puede guardar la acelga hervida?
Las acelgas hervidas se pueden almacenar en la nevera manteniéndose intactas por 3 días. También, puedes congelar las acelgas hervidas durando hasta 12 meses en perfecto estado.
¿Cómo descongelar acelga hervida?
En el caso de las verduras con hojas (la espinaca, la acelga, el kale) sólo necesitas lavarlas y escurrirlas. Para usarlas, sacalas del freezer y mandalas de una al horno o la sartén. También podés probar con el método del “blanqueo”: lo ponés unos segundos en agua hirviendo y luego lo ponés en agua con hielo.